1. Ficus
De ramas puntiagudas, arqueadas y de gran tamaño, el Ficus es una planta tropical perfecta para espacios de interior. Con ella se consigue dar un aspecto de naturaleza muy agradable y gracias a su aspecto de árbol es ideal para colocarlo en esquinas, junto al sofá o cerca de una escalera. Cualquier lugar es bueno para ubicar esta plantita muy resistente y alegre.
2. Pack de suculentas
Las suculentas son plantas de muy fácil mantenimiento, ya que por sí solas acostumbran a acumular el agua para adaptarse al hábitat en el que crecen. Con algunas horas de luz al día, riego moderado y estar alejadas de las corrientes de aire, permanecerán en buen estado por mucho tiempo. Para que te hagas mejor una idea, en invierno, cuando las temperaturas descienden, apenas requieren riego; mientras que, en primavera, habrá que ofrecerles agua cada 10-12 días a lo sumo. Son plantas muy agradecidas que quedan bien en cualquier espacio.
3. Lirio de paz
Si buscas conseguir un espacio relajado y con el aire purificado, esta es la mejor planta para ello. El Espatifilo, conocido como “lirio de paz”, aporta mucha tranquilidad y es tan fácil de cuidar que cualquier aficionado a la jardinería sabría sacar adelante esta variedad. Es de un verde intenso y produce unas preciosas flores blancas rectas.
4. Cinta o Lazo de amor
Las cintas, también llamadas “lazo de amor” o “planta repollo” es una de las plantas de interior que más decoran por sus bonitas hojas verdes. Y lo mejor es que no necesita ni la más mínima dedicación: este tipo de planta no requiere apenas luz y soporta altas temperaturas. Lo ideal es colocarla en pasillos o recibidores, para evitar iluminación directa, y con regarla una o dos veces a la semana nos devolverá un crecimiento y vitalidad espectaculares.
5. Set de cactus
De la familia de las suculentas, que ya hemos comentado anteriormente. Los cactus son plantas que transforman sus hojas en espinas como acto de defensa ante depredadores, a la vez que es un método de prevención de la pérdida de agua (la almacenan en su tronco). Estos que te proponemos son pequeños, por lo que pueden ser una alternativa perfecta para esos huecos de estanterías que quedan vacíos y no sabes cómo decorar.
6. Poto con colgador
Si hay una planta idónea para las personas descuidadas que conocen poco de jardinería, ese es el poto. Una variedad que sobrevive muy bien en espacios mal iluminados y cuyos riegos deben hacerse espaciados para no inundarla, si queremos evitar que las hojas amarilleen. Habitualmente se colocan en espacios altos, ya que las ramas del poto se hacen colgantes con su crecimiento.
7. Lengua de suegra
Sansevieria Zeylanica es el nombre técnico de la conocida como “lengua de suegra”. Se denomina así por lo alargado de sus hojas bicolor, en forma de espalda. El punto positivo de esta planta es que es muy compacta, ocupa poco espacio y puede colocarse en cualquier rincón. En cuanto a la luz, estás de suerte porque esta prefiere incluso los espacios de sombra. No necesita casi riego, basta con poner un plato con agua en la base de la maceta cada dos semanas y ella sola se administra según su necesidad de humedad.
8. Planta de la oración
También conocida como Maranta Leuconera o tricolor, la planta de la oración debe su nombre a que por las noches tiende a cerrar sus hojas levemente. En cuanto a sus cuidados, esta planta necesita un sustrato turboso, humedad ambiental y bastante luz indirecta. Si seguimos estas pautas, veremos cómo la planta rebosa vitalidad, mostrando sus vibrantes colores.
9. Anturio
Si no buscas tanto verde sino una planta colorida, el Anturio te sorprenderá. Es una de las plantas más resistentes para interior que podemos encontrar. Su flor es espectacular: tiene forma de espiga y está rodeada por una hoja de color rojo intenso, como si de un corazón se tratase. Aunque esta es roja, en el mercado podemos encontrar otras blancas, naranjas o púrpuras. Requiere altas temperaturas, ya que es una variedad tropical.
10. Monstera o Costilla de Adán
La reconocerás fácilmente por sus llamativas hojas grandes y agujereadas. La monstera necesita mantener siempre sus hojas hacia arriba, por lo que en ese sentido sí que necesita una atención especial y una guía para que no pierda la orientación. Lo ideal es que se ubique la maceta en un lugar espacioso para que pueda crecer sin limitaciones.
11. Calathea
Esta alternativa nos encanta. La calathea es espectacular. Con sus hojas bicolor en verde azulado y violetas en el revés, llama mucho la atención, además de por su frondosidad. En este caso también estamos ante una planta que necesita temperaturas altas, por encima de los 15 grados. Así mismo, demanda humedad, por lo que pulverizar las hojas regularmente beneficiará a la planta creando un ambiente más propicio para su crecimiento.
12. Corazón de hombre o Peperomia
Las gruesas hojas de la Peperomia con un color verde intenso quedan preciosas en cualquier estancia del hogar que queramos adornar. Sin duda, de todas las variedades mencionadas en este artículo, es de las plantas con mayor capacidad decorativa. Y también, similar al resto de opciones, necesita de pocos y básicos cuidados: temperaturas suaves, humedad ambiental y exposición indirecta al sol harán que la planta crezca con todo su esplendor.